¿Qué necesito saber sobre el certificado de discapacidad y la esclerosis múltiple?

El certificado de discapacidad, antiguamente llamado de minusvalía y de idénticos efectos legales, es un documento oficial que acredita la condición física de una persona, justificando así que pueda tener uno o varios impedimentos para realizar determinadas actividades. Para que sea reconocida, la ley establece que la discapacidad debe ser por lo menos del 33%.

¿Por qué puede ser buena idea obtener el certificado? Para las personas con EM, este es un documento útil en varios sentidos. De entrada, los pacientes se pueden beneficiar de servicios de información y de asesoramiento, así como sus familiares. Además, también podrán disponer de recursos sociales para mejorar su calidad de vida, herramientas de apoyo personal, educativo, laboral, de accesibilidad, y otras ayudas más técnicas.

El grado (%) es una forma de medir las limitaciones en la actividad y las dificultades que pueden encontrar las personas discapacitadas para realizar actividades, expresadas en porcentaje. Una limitación en la actividad abarca desde una desviación leve hasta una grave, comparándola con la manera en que se espera que la realizaría una persona sin esa condición de salud.

Las personas con esclerosis múltiple tienen la posibilidad de solicitar el certificado, según lo que se prevé en la legislación vigente.

Así, una comisión de expertos, integrada por un médico, un psicólogo y un trabajador social, hace un reconocimiento completo al solicitante y valoran el caso desde todos los ángulos posibles. Es decir, no solamente se consideran los síntomas estrictamente físicos de la dolencia, sino también factores psicológicos y sociales.

En este sentido, si existen casos de otras enfermedades graves en la familia de la persona evaluada o ha sufrido cualquier otro problema, también se tendrán en cuenta.

Para solicitar el certificado de discapacidad, el interesado debe acudir al centro base que más cercano a su área geográfica. Es allí donde se asignan a los especialistas que deberán valorar su salud. Además, es el lugar donde le informarán de todos los servicios que tiene a su alcance cerca de su hogar. Entre otros documentos detallados aquí, es necesario preparar toda la información médica disponible que avale la condición de discapacidad.

Tras un examen de diversos baremos se determinará el grado de discapacidad. Si el solicitante está en desacuerdo con el dictamen, tiene la posibilidad de interponer un recurso por la vía jurisdiccional social. El grado de discapacidad es revisable cada dos años (por mejora o por agravamiento), si la persona interesada así lo pide. Se debe tener en cuenta que un factor importante en la valoración del grado es el baremo de movilidad reducida. Si con el paso del tiempo este empeora, se tiene derecho a una revisión.

Fuente de información:

Certificado de Discapacidad. Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid. [acceso 21 de noviembre de 2012]. Disponible en: http://famma.org/preguntas-frecuentes/100645-certificado-de-discapacidad